Linux en los Institutos.
Editado a las 20:10 del 2004-01-08
Estas fiestas tuve ocasíón de tomarme un par de papalagis con un tío de Beatriz, que es director de un instituto de secundaria (¿se llaman así?). El caso es que, entre copa y copa, me comentó aquello de:"¿Oye, y eso del LINUX, de qué va?"
Ocasión que aproveché para soltar la obligatoria perorata en defensa del software libre y su comindad y para despotricar contra los viles planes del imperio de Redmond. Vamos, lo que haría cualquier talibán que se precie. Y la respuesta que obtuve fue:
"Sí, sí, todo eso está muy bien, pero ahora me han traído quince ordenadores con el Guadalinux ese a mitad de curso y ya llevamos todo el tiempo dando Windows. ¿Qué puedo hacer?"
Pensé que podría intentarse una instalación con arranque dual, pero antes de que dijese nada, ya me respondió que el informático del centro se estaba volviendo loco intentando meterle Windows a esos PCs. Cosa que me parece relativamente sorprendente y me hace dudar de la eficacia del técnico, pero tampoco me parece tarea sencilla;
a fin de cuentas un ordenador fabricado "ad hoc" para tirar de Linux puede ser que no venga con los típicos CDs de drivers y respetar el sistema linux ya instalado puede condicionar bastante la instalación de Windows -de hecho, de entrada Windows se cepillará el gestor de arranque de Linux ya existente-.
En definitiva, que los ordenadores han llegado al centro y, actualmente, se encuentran criando malvas porque no se pueden cambiar los contenidos de las asignaturas a mitad de curso. Por si fuera poco, los profesores no han tenido formación acerca de Linux (y a fé mía que la van a necesitar) y los técnicos tampoco parecen desenvolverse muy bien. Un gasto de dinero público de más (para el año que viene, cuando los ordenadores puedan aprovecharse comenzando el temario de Informática con Linux, los ordenadores valdrán las tres cuartas partes menos) y que además supone una complicación adicional, pero la Junta de Andalucía podrá pregonar a los cuatro vientos que ya no se depende de Microsoft, que se han ahorrado no sé cuantos millones en licencias y ganarse alguna que otra historia en la portada de Barrapunto y en El País.
Ante mi cara de perplejidad, mi interlocutor me contó otra historia. Años atrás, muchos años de hecho, la Junta envió a su Centro un aparato reproductor de vídeo. Genial, ¿verdad?. El Instituto todavía no tenía ni televisión.
