Faltaban programadores, y yo con estos pelos
Editado a las 14:08 del 2007-07-15
Contaba Enrique Dans el otro día que faltan programadores en España, anotación que ha tenido amplia repercusión en la blogosfera, con respuestas muy lúcidas como la de Antonio Ortiz. Pero de todas las respuestas la que más me ha chocado es la de Antonio Mas, que habla de la necesidad imperiosa de importar desarrolladores del extranjero, especialmente latinoamericanos (sic)
Así que me he asustado un poco, porque a ver si resulta que el mercado de trabajo ha explotado y yo estoy haciendo para la empresa donde trabajo una obra social que ni Cajamadrid. Y me he dirigido a las webs favoritas de búsqueda de empleo a ver cómo está la cosa esta del empleo.
Y entonces, claro, entonces, la verdad sale a flote.
Una búsqueda por trabajos relacionados con PHP en la provincia de Madrid devuelve 12 ofertas de empleo, con la siguiente distribución
salarial:
- No especificado: 20
- Menos de 13500 EUR: 5
- Entre 13500 y 21000 EUR: 4
- Entre 21000 y 26000 EUR: 6
- Más de 25500 EUR: 3
Suponiendo que las ofertas con salario no especificado sigan una distribución idéntica a las que sí lo especifican (y mira que me extrañaría), tenemos que de 18 ofertas de empleo, la mitad están por debajo de 21000 ¤, que traducido en pesetas son tres millones y medio brutos.
Y sólo un 16% de las ofertas supera los 25500 ¤ brutos anuales, o lo que es lo mismo, 4250000 pesetas.
Permítaseme poner esto en perspectiva. En 1998 el que esto escribe, recién titulado sin experiencia, cobraba trabajando para Eliop lo que ahora serían 15000 euros brutos anuales, más que el 27% de las ofertas que publican el salario
ofrecido. ¿Alguien me puede decir qué ha pasado con la escasez de programadores nacionales, si casi diez años después de mi incorporación
al mercado laboral se paga ahora menos que antes?
Lo que faltan no son programadores, sino empresarios. De esos que tengan la suficiente vista como para comprender que la calidad (el talento, como se suele leer en las ofertas) hay que pagarla. Si no puedes comprar un Audi al precio de un Seat, ¿por qué vas a poder contratar a todo un Leonardo del desarrollo de software y la administración de sistemas por sueldos que no darían para pagar una hipoteca en las afueras de Madrid?
¿Y cómo ha sido así, adónde han ido a parar todas esas legiones de titulados en Informática que salen cada año de las Facultades? El misterio es bien sencillo: no se han colado por una grieta como el lago chileno de marras... simplemente se han zombificado, o son Dilberts corporativos o se han sacado unas oposiciones. O han dejado el mundo del desarrollo para dedicarse a alguna otra actividad donde las jornadas sean por lo general de ocho horas y uno tenga tiempo para, por ejemplo, llevar y traer los hijos del cole.
Qué raro se hace, ¿no? ¡Un programador con hipoteca, coche, y hasta hijos!