Del «asunto Genbeta»
Editado a las 13:54 del 2008-02-09
Da la impresión de que se está librando hoy una batalla en las autopistas de la información de la internet hispana. Me refiero a los ataques DDOS a Weblogssl y al Meneame. Pero más que una batalla del gran cine bélico parece una peli de Mad Max, con una desigual pelea entre un puñado de buenos y una miríada de bárbaros asesinos.Al respecto varias cosas:
- En primer lugar, expresar mis ánimos y apoyo a los técnicos que trabajan en Weblogssl (NTT incluido) y Meneame (Ferca incluido). Por mi trabajo tengo que llevar de vez en cuando un móvil de guardia y sé por experiencia que no es agradable verse en medio de la tormenta perfecta durante un fin de semana. Hoy han sido Genbeta y el Menéame, pero mañana podría ser La Coctelera. Parece que el sitio de Galli ha capeado el ataque y resiste bien, pero a estas horas Genbeta sigue fuera de c combate
- Lo siguiente que se me viene a la cabeza es la confianza que depositamos en los servicios de internet que usamos y la fragilidad de los mismos. No se me ocurren muchos sitios que puedan aguantar un trallazo de este calibre.
- El motivo del ataque a Genbeta (su derivación al Meneame parece ser un efecto colateral) ha sido la denuncia de las prácticas fraudulentas de los servicios que se dedican a indicar quién te ha borrado de su lista de contactos de Messenger. Muchos nos hacemos cruces con este tipo de servicios, que implican dar tu cuenta y clave de Hotmail a una tercera parte, que puede usar esa información para lo que le plazca. Pero resulta que los poster childs de la Web 2.0 hacen esta misma práctica: Twiter, LinkedIn, Plaxo, Facebook, hoy en día cualquier te ofrece la posibilidad de importar tus contactos de correo de GMail, Yahoo! Mail o Hotmail. Y muchos usuarios -entre los que me encuentro- ofrecen alegremente sus credenciales de correo para añadir contactos en tal o cual red social. Y tan grave es darle tus credenciales a LinkedIn como a cualquiera de estos chiringuitos fraudulentos.
- Otra cuestión es lo alegremente con que se producen linchamientos en Internet (aunque esto ya no me sorprende) publicándose de manera impune direcciones IP de equipos que o bien no tienen nada que ver con el asunto -quien esté detrás del ataque sabe lo suficiente como para falsear una IP- o bien son meros zombis.