La tomadura de pelo (y VI)
Editado a las 03:06 del 2003-07-07
Todo está ocurriendo bastante deprisa. El viernes firmamos el contrato de compraventa, por lo que ya estamos vinculados para comprar el piso de nuestros sueños. Algo más de 240000 euros en el norte de Alcorcón. La única pega es que la escritura tiene que hacerse de aquí al 31 de Julio para que la compra se haga efectiva, en caso contrario perderemos las arras que hemos entregado (9000 eurillos de nada)En principio no tendría por qué ocurrir nada raro, porque Cajamadrid se ha ofrecido gustosamente a financiar nuestro nidito -gracias, indudablemente, a las gestiones del agente inmobiliario que intermedia en la venta-, así que lo único que podría dar al traste con la operación es un retraso excesivo en la tasación o una tasación efectiva muy por debajo del valor real. Tengo bastante confianza en que esto no se produzca, así que de aquí a un par de semanas ya podría estar bañándome en la piscina y sacando fotos de mi casa para colgarlas en la bitácora.
En cuanto al tema que nos ocupaba en la anterior entrada -sobre el dinero B ya tal- los vendedores no han hecho menor referencia a la cuestión, así que ni Bea ni yo haremos por sacarlo. Ahorrarse 70000 pesetas por millón tampoco es para tanto, y al final terminaríamos pagandolo todo a la hora de vender el piso.
Cuando firmamos el contrato de compraventa habíamos preparado todo tipo de estrategias sobre cómo llevar una negociación que nunca se produjo: la fecha tope para escriturar era innegociable porque los vendedores -una pareja de jóvenes que estaban igual de nerviosos que nosotros- tienen que pagar su próxima vivienda para esa fecha y necesitan el dinero. Y a nosotros nos gustaba demasiado el piso y el precio es lo suficientemente atractivo como para arriesgarse...
Espero que lo de la tomadura de pelo no adquiera un nuevo significado -indeseado e inesperado- de aquí a unos días...